jueves, 12 de junio de 2008

Mis mejores canciones olvidadas (II)

Mando Diao - The new boy


She was only 21
But so much older than she's now
Now she passed the 24
I guess it's time to say goodbye

Here's the new
Here's the real
Here's the life you like to live
Now here's the new boy taking on the world tonight

When we met
She smelled like honey
When we kissed she tasted tears
Then for 14000 seconds
We made love behind old fears

Here's the new
Here's the real
Here's the life you wished you live
Now here's the new boy taking on the world tonight
Take the words on your way I don't waste the things I say
When in doubt fuck the world
Forget all the things you've heard
Now here's the new boy taking on the world tonight

Why so sad? Don't you like my way of life?
I don't last forever neither do the things we love
You are wise this is now
This is all the things I want
Everything around us
Is moving except time
She was only 24
But so much younger than the past
We've laid all our troubles down

And now it's us against the rest
Here's the new here's the real
Here's the life you like to live
Now here's the new boy
Taking on the world tonight

lunes, 2 de junio de 2008

Reflexiones en voz alta (I)


Me encontraba hace pocos días leyendo un artículo de uno de esos nuevos aficionados que se llaman a sí mismos literatos o periodistas, lo que más les plazca en el momento, cuando mi mente, que no pasa una, recordó (no por casualidad) a cierta persona de cuyo nombre no quiero acordarme.

Y es que en dicho artículo cambiaban lo por le y le por la. Fíjense que si juntamos estos pronombres aparece un divertido juego de palabras que los define bien: lelos y lelas.

Mi memoria, que, aunque traicionera a veces, no me suele fallar, me trajo imágenes de mi persona (unos años más joven) estudiando la diferencia entre el objeto directo y el indirecto. Y no se salten el paréntesis, que aunque sea información adicional, en este caso es muy importante. Era más joven, me encontraba en la época del colegio o el instituto, no puedo concretar ya que para mí fueron toda una. Y no estudiaba moda, ni música, ni cine, ni arquitectura. Estudiaba cosas básicas como son la diferencia entre un directo y un indirecto y que dos más dos son cuatro.

¿A que ustedes no creerían la palabra de un matemático que no sabe hacer la sencilla cuenta de 2 + 2 = 4? Pues lo mismo le pasa a uno con estos periodistas, sean de moda o de música, que al ver que no saben diferenciar los complementos (complementos de lengua, no de ropa, no vaya a ser que algún ignorante se me pierda), duda mucho de sus capacidades para dicha moda o dicha música.


Así pues, nada de lo escrito en aquel artículo (por llamarlo de alguna manera) me resultó verosímil, pues sólo me pude fijar en que el verbo adorar implica, por su propia naturaleza, un objeto directo, ya que has de adorar a algo o a alguien y, por tanto, tendrá que ir, si es que es un pronombre el que lo acompaña, con un lo o un la a su vera, pero nunca con un le.

Qué injusta es la vida, Cervantes se quedó con una mano y éstos tienen dos.

viernes, 30 de mayo de 2008

Mis mejores días olvidados (I)

Una banda en el corazón

Hace ya tres años de uno de mis mejores días olvidados. Que realmente no está tan olvidado, sólo que no lo saco a pasear demasiado, por miedo a la tristeza amarga de recordar aquellos momentos que ya no volverán.

Fue el fin de una era. De la mejor. Nunca dudo que fue la mejor. El mejor drama, las mejores (son)risas, las mejores alturas.

La vida que ha seguido nos ha aportado grandes momentos, pero como aquellos, nada.

Y no es tristeza, sino alegría. Por haberlo vivido. Con ellos/as.




jueves, 29 de mayo de 2008

Mis mejores discos olvidados (I)


Jarabe de Palo - Flaca (1998)

En especial la canción "Grita"


Hace tiempo alguien me dijo
cual era el mejor remedio
cuando sin motivo alguno
se te iba el mundo al suelo

Y si quieres yo te explico
en qué consiste el misterio
que no hay cielo, mar ni tierra
que la vida es un sueño

martes, 10 de julio de 2007

malos vientos

Durante cierto tiempo me decían que creyera en el viento. Pero hace mucho que dejaron de hacerlo.
Y es que yo jamás creí en el viento. Siempre me pareció un insulto hacia los otros vientos creer en uno especial.

Me decían que el viento me ayudaría a ser mejor persona. Y que en las noches de invierno, el
viento podría ser cálido. Y que en las noches de verano, el viento podría ser frío. Pero a mí eso me parecía más opio que viento.

Me enseñaron cómo hablar con el viento y durante un tiempo lo hice. Pero crecí y preferí enfrentarme a la vida sin sueños de viento.

Pues, ¿no es acaso el viento el que levanta la arena que te golpea en la piel? ¿Y no es el viento el que se lleva casas por delante?

No, no me pidas que crea en el viento, soy incapaz al ver cómo te lleva lejos. Y lo más triste es que no es el viento el que te aleja, eres tú el que soplas para marcharte a luchar contra molinos.

Molinos de viento, qué paradoja.

Luchas, al fin y al cabo, contra lo que crees. Y no lo ves.
Y perderás tu vida allí. Y yo viviré por ti, sin ti.




miércoles, 20 de junio de 2007

Las motocicletas son para el verano


Puedes montar en motocicleta e ir a 50 por hora, pero tus recuerdos no se quedarán atrás.

No hace falta que me digan que la culpa es del otro, porque yo sé que es precisamente de quien lo dice. En las noticias han dicho que van a intentar mejorarlo. Pero el tiempo, que es muy sabio, me atiza para que no sea iluso.

No hace falta que me digan que no me van bien las cosas, sé cuando el sol quema y cuando abrasa.

Tomaba pastillas para dormir. Pero no dormía ni un mísero segundo. Yo fingía no darme cuenta pero la oía levantarse todas las noches. Debían ser recuerdos, o historias de miedo. No lo sé. Pero todas las noches se levantaba aún habiendo tomado pastillas para dormir.

No necesito que me digan que no debería estar aquí. Tengo reloj y sé que hora es y dónde debería estar.

No necesito que me digan nada. Sólo que vengas y me despiertes. Y que me susurres, si no es mucha molestia, que mañana el mundo será mejor.

sábado, 2 de junio de 2007

Ana y Otto


Yo te voy a querer siempre.
Y si se acaba la gasolina, me muero.